Estamos llenos de ‘realitys’, en ellos el público puede observar como sus protagonistas se enfrentan, se mechonean, reaccionan, se arrepienten, lloran, recogen pita para luego tomar impulso y volver a mechonear al que se deje. La semana pasada se estrenó uno de ellos y tiene en vilo a la opinión pública: La Huelga de Pilotos de Avianca, todo un programa de tele-realidad.
En este espectáculo se enfrentan dos equipos que buscan: unos, mejoras y otros, ahorro, porque la pelea es alrededor de lo laboral, de la convivencia diaria. Después de aguantar varios años de ‘mamaderita de gallo’ el equipo de los ‘pilotos’ resolvió amenazar por convivencia a Germancito, el dueño del equipo Avianca, que a pesar de estar muy bien maquilladita de aerolínea nacional, todos sabemos que debajo de la faldita roja, tenemos una multinacional extranjera, más exactamente del Brasil.
Los capitanes de vuelo, amenazaron al Capitán Efromovich (tiene apellido de villano de Dragon Ball Z), con hacer huelga si no era atendido su pliego de negociación. Inmediatamente el boliviano-brasilero se ‘elevó’ en Ira Santa, pues consideró que las solicitudes de los pilotos eran exageradas e inmediatamente ordenó a su Vicepresidenta de Asuntos Públicos, María Paula Duque (la esposa del director de Blu Radio -Néstor Morales- y hermana de Iván Duque, el inquieto precandidato Uribista) que expusiera en los medios de comunicación el terrible exceso de los pilotos.
Patalearon por todos los medios, la empresa de Efromovich que obtuvo utilidades de 46 millones de dólares en 2016, lloriqueó pues le parece bárbaro el incremento del 40 por ciento que pidieron los pilotos para equiparar su sueldo con los pilotos Avianca en Brasil y Perú (Allá ganan U$ 13.000 según Portafolio**). Les pareció terrible darle unas horas para a comer a quienes se sientan de corrido días enteros a volar y calificó de un asco darles pasajes a las familias de los trabajadores aéreos (a pesar de que lo vienen haciendo desde tiempos inmemoriales, sin ningún lío).
Al capitán Aviancamovich, le preocupa que por soltarle 5.000 millones de pesos año a los pilotos se le quiebre la empresa, por ello voz en cuello amenazó con contratar pilotos nacionales para reemplazar los de la huelga. Obviamente 1.800 pilotos no se encuentran a la vuelta de la esquina, ni en los árboles. Nuevamente entró en cólera don Efro y después de llamarlos criminales, con una lagrimilla en el ojo y moqueando cual actorcillo en Casa Estudio, procedió a amenazarlos –Me las van a pagar–, y ofreció traer pilotos extranjeros para suplir la operación de la huelga… muy probablemente Peruanos o Brasileros de los de trece mil dolaretes…
El 27 de septiembre a las 12 de la noche, al mejor estilo de la prueba de talento y después de prolongados ‘ensayos’ para la negociación, el Sindicato de Pilotos aceptó valorar la propuesta de Avianca de subir el sueldo en un 28 por ciento (pero no crean que es que estaban mal pagados, es que los capitanes son exageradiños, diría don Efro). Aviancamovich fue tajante, –les damos hasta las 2:00 am para que se definan–. Los pilotos con sueño, pero no dormidos, definieron consultar ‘el libreto’ a su Asamblea, los negociadores de Avianca van al baño, se arreglan y proceden a romper la negociación.
La ministra de trabajo Griselda (indiscutible nombre de Antagonista de Novela), recibe una carta redactada por la Vice pero firmada por las otras pequeñas aerolíneas, pidiendo acabar con la huelga. ‘Gris’ se juega en un cara a cara, a favor del Holding Empresarial Avianca y emite un documento que obliga a un Tribunal de Arbitramento. Los Pilotos no se mueven un centímetro, afirman que la ley dice que tienen hasta 60 días más, de tiempo en la Casa Estudio, para hacer huelga antes de que el gobierno pueda convocar a un árbitro válidamente.
Y así nos tienen a todos pegados del TV, capítulo a capítulo, viendo a Don Efro cogerse su calva a dos manos mientras ordena hacer videos a todos sus vicepresidentes y directivos, de sueldo millonario, con el hashtag #YoNoParo.
Pero los espectadores no nos damos cuenta que, además de los problemas obvios que trae una huelga, tenemos brotado el cuerpo, dilatadas las pupilas y fuertes escalofríos, don Efro dice que es alergia por los altos sueldos de Avianca (El de los pilotos por supuesto, porque el de los directivos no se puede tocar), pero la verdad es que estamos contagiados de ‘Aviancadepedencia’, enfermedad de los monopolios disimulados.
Mientras tanto en la Casa Estudio, los Protagonistas de esta Novela cantan: “No renunciaré, voy a llegar, seguiré mi camino, hasta el final…” mientras piensan en cómo pueden sacar de taquito al contendiente. Esto se puso bueno, sólo falta que mechoneen al director encargado de la Aerocivil en una ducha durante un receso de la negociación, porque a Don Efro no hay de dónde… ¿qué pasará el próximo capítulo?
**http://www.portafolio.co/negocios/empresas/el-lio-entre-avianca-y-sus-pilotos-por-los-sueldos-504095)