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¡Pilas Colombia! Es indispensable estar alerta


Cuando se aproximan las elecciones y se acercan las oportunidades de acceder a posiciones que traen consigo facilidades para obtener beneficios particulares, surgen múltiples acciones por parte de los interesados.

El terreno abonado para quienes desean aprovechar la ocasión es sin duda la crítica, el desprestigio, las promesas, las mentiras, las componendas y, principalmente, las situaciones de dolor y vulnerabilidad que padecen las personas, es ahí donde literalmente “pescan en rio revuelto” los corruptos.

No creer todo cuanto dicen, analizar la realidad, observar los comportamientos cuando no hay visibilidad, revisar los antecedentes, la doble morar, no acceder a sus tratos, entre muchos otros, son algunas de las precauciones que hay que tener presentes para proteger las decisiones que como colombianos debemos tomar.

Ante los evidentes casos de corrupción que a diario se denuncian y la falta de una justicia que en realidad sea correctiva y ejemplar, el tema de la corrupción se ha vuelto ‘caballo de batalla’ de unos y otros.

La mayoría de las corrientes se apoyan en el liderazgo y la buena imagen de quienes trabajando arduamente y desafiando las maquinarias, han emprendido esta lucha, no como un slogan de campaña, sino como una causa que es necesario impulsar y apoyar, si se quiere construir un nuevo país incluyente y con oportunidades para todos.

Los problemas que enfrenta Colombia tienen, en su mayoría, origen en la corrupción, es por ello que se hace necesario acabar con ella, erradicarla. La salud, la industria, la educación, la cultura, el transporte, el manejo de los recursos naturales, el medio ambiente y en fin, todos los aspectos que componen la realidad nacional han sido salpicados con este terrible flagelo.

Ya se iniciaron las noticias falsas, los trucos para desacreditar y sembrar miedo, otra forma de terrorismo que ha venido tomando fuerza y que pretende con ello contrarrestar la falta de credibilidad y honorabilidad, como se diría coloquialmente “el rabo de paja” para desviar la atención, desinformar y confundir a los electores.

Es importante estar atentos y ponernos alertas para que nuestra indispensable y valiosa participación sea la correcta. Colombia esta habida de cambios positivos que la rescaten de las manos deshonestas que han venido aprovechándose de sus riquezas humanas y naturales.

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